lunes, 18 de febrero de 2013




No hay despedida sin una buena comida entonces aqui estoy en gimnasia de supermercados con mi asesor para nutrir las sesiones de grabaciones y obras de despedida en el campus de cuenca.

Castro Flórez: "Hago un ejercicio de bibliomancia con Las Bodas de Cadmo y Harmonía: “El monstruo puede perdonar a quien lo ha matado. Pero jamás perdonará a quien no ha querido tocarlo”. Calasso alude a Edipo ciego y mendigo que no lleva una Gorgona en el pecho, ni puede apelar a potencias apotropaicas. Por puro azar tropiezo, una vez más, con la nefasta inversión de la lucidez que se adhiere a la conciencia. No se trata, meramente, de que la ceguera sea una forma (retórica finalmente) de la perspicacia sino de que no somos capaces de enfrentarnos con lo descomunal que late en nuestras entrañas."

Según Barrie: "Pero sencillamente hay que encajar y Peter le toma a uno medidas para el árbol con tanto cuidado como para un traje: la única diferencia es que las ropas se hacen para que le encajen a uno, mientras que uno tiene que estar hecho para encajar en el árbol. Por lo general es muy fácil hacerlo, por ejemplo poniéndose muchas ropas o muy pocas, pero si uno abulta en lugares poco apropiados o si el único árbol disponible tiene una forma extraña, Peter le hace a uno una serie de cosas y tras eso uno encaja. Una vez que se encaja, hay que tener mucho cuidado para seguir encajando y esto, según iba a descubrir Wendy encantada, mantiene a toda una familia en perfectas condiciones."


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