"La lucha [...] llega demasiado tarde, y cada remedio sólo agrava la enfermedad, pues ésta se ha apoderado de la médula de la vida espiritual, esto es, de la consciencia en su concepto o de su esencia pura misma; no hay por eso tampoco ninguna fuerza en ella superior [...] sólo la memoria conserva todavía como una historia pasada, no se sabe cómo, la forma muerta de la figura del espíritu; y la nueva serpiente de la sabiduría, encumbrada para la adoración, sólo le ha quitado sin dolor una piel marchita." (Hegel)
La historia de España es un ejercicio de solapamiento. El pasado sale a la venta a cada instante como futuro. El siglo XIX es una nebulosa, un agujero negro. Hacia él se dirige toda la luz.
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