Fabada's icecream

José Noval y su hermana Ursula, heladeros gijoneses, refrescan el verano a sus clientes con, un postre sin precedentes: el helado de fabada. Aseguran ambos artesanos que esta especialidad "se elabora sin conservantes ni colorantes". No precisan, sin embargo, el nivel de kilocalorías del heladito. La receta es sencilla: "Se preparan unas fabes caseras, y luego se baten con leche y azúcar". Junto al helado de fabada, que comparte mostrador con los de chocolate, turrón, higos o vainilla, también ofrecen otras innovaciones gastronómicas, como el helado de sidra, que comercializan desde hace tres años, o el de queso de cabrales, otro reto no menos fuerte. "Lo hacemos igual", declaran, "con leche, azúcar y auténtico queso de cabrales". Pero en esta especialidad no son exclusivos y cuentan con un competidor, Mario García, propietario de una céntrica cafetería, quien también ofrece una exótica variedad de helado de cabrales.-