Cristalizaciones en aviones y Avalanchas de material incandescentes (nubes ardientes o corrientes piroclásticas)
Se reconocen tres tipos de avalanchas identificadas por el nombre de los volcanes en el que cada uno se observó por primera vez, éstos son los efectos (Sofrière, Merapi y Pelee). A pesar de que los mecanismos por los que ellos se forman son diferentes pero sus efectos son semejantes: una masa turbulenta de gases supercalentados en la que hay polvo, cenizas calientes y fragmentos de lava que viajan, incluso, a 160 km/hora la cual destruye todo a su paso. La avalancha de material incandescente que devastó la población de St. Pierre, Martinique, en 1902, causó la muerte de los 28 000 habitantes.
gases volcánicos
Los gases expulsados por acción volcánica contienen diversas proporciones de vapor de agua, bióxido y monóxido de carbono, bióxido y trióxido de azufre, ácidos sulfhídrico, clorhídrico, fluorhídrico, metano e hidrocarburos más complejos, así como nitrógeno, argón y otros gases inertes que afectan a la población de diversas formas. El bióxido de carbono y el bióxido de azufre pueden causar asfixia; el primero, al acumularse en "masa" en zonas muy bajas, y el segundo por los efectos directos que causa el tracto respiratorio.
Por otra parte un equipo de biólogos y documentalistas de la BBC han descubierto arañas de aspecto bizarro, ratas del tamaño de un gato y ranas con colmillos habitando en un enorme y prístino volcán en las alturas de Papúa Nueva Guinea.
Las especies fueron encontradas en el cráter del monte Bosavi. Entre estas, una rata herbívora de 3 pies de largo y más de 3 libras de peso.
Los científicos sospechan haber encontrado más de 40 nuevas especies, incluyendo: 16 nuevos tipos de ranas, una nueva especie de gecko, tres nuevos ejemplares de peces, 20 tipos de insectos y arañas y una nueva clase de murciélago.
De todas estas, se destacan un gecko con la capacidad de camuflarse, una rana con colmillos y un pez que emite sonidos similares a los de un ronquido.
En uno de los viajes fuera del cráter, encontraron una oruga gigante con cientos de larvas a su alrededor.
Con la ayuda de guías locales, el equipo pasó dos semanas documentando sus descubrimientos. El viaje fue planeado con varios mese de anticipación por la dificultad que implica el descenso a dicho cráter.
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