domingo, 18 de abril de 2010
Kant tenía un loro, llamado Friedrich. Según cuentan, el loro del filósofo aprendió bastantes palabras de La Crítica de la Razón Pura. Tenía un caracter endiablado y no era precisamente hospitalario. En su famoso viaje a los Estados Unidos, Kant no dejó de llevar su "animal de compañía" y declaró a su secretario, que trabajó a su lado 23 años, que no era otra cosa que un gesto de despreció hacia aquel "país perverso". En una crónica de época leemos que Leibniz renunció a dar una conferencia en Königsberg aduciendo que el loro de Kant estaba aprendiendo algunas palabras insultantes principalmente referidas a su persona.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario