lunes, 26 de septiembre de 2011

TODO SOBRE MI FURGON


con el cambio de siglo, me tocó ir en representación de la universidad como jurado a un concurso de pintura de una comuna aledaña a la capital. todo fue amabilidad hasta cuando propuse como ganador a un reo de la penitenciería ubicada justo al frente del recinto municipal, lugar donde estábamos dirimiendo. el jurado estaba compuesto por un representante gremial de los artistas, otro de una organización artística algo más que conservadora, el alcalde la comuna y quien postea. no fue fácil otorgar el primer lugar al delincuente que concursó con una vista de la municipalidad desde la ventana de su celda. confesaré que fue algo más que una acalorada discusión sobre arte. y si bien no llegué a la invocación del david paisajista, en clave papillón, debo reconocer que estuve más que cerca. tiempo después, un egresado me agradeció la mención honrosa recibida en dicho concurso aunque le intrigaba el asunto del primer lugar. bueno, como a todos los demás.

2 comentarios:

  1. Desde aquí se ve bastante claro. Gracias. De todos modos, mi abuela cundió.

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  2. Y partid los caminos y volver con las amantes cuando se disuelvan.

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